Luego de varios meses de inactividad absoluta -10 meses sin abrir sus puertas- las cámaras empresariales, sindicatos y distintos sectores relacionados con el circuito de exhibición cinematográfica, acordaron un protocolo con el Ministerio de Cultura para la reapertura de salas y complejos.
Los pedidos para la apertura de cada sala será evaluada por la Jefatura de Gabinete de la Nación quienes analizarán la situación de los contagios en cada distrito. Lo más destacado del texto informado fue que las salas no podrán superar el 50 por ciento de su capacidad, sin excepción.
En este sentido, se aceptará la presencia de grupos de hasta seis personas, en lo que se llama «burbuja de recreación», las cuales deberán mantener una distancia de entre 1,5 y dos metros con el resto de los espectadores, para lo que se dejará una butaca libre de cada lado.
Además, el público deberá permanecer con tapabocas puesto y solo podrá quitárselo momentáneamente para ingerir algún alimento o bebida.
Por su parte, cada sala deberá contar con un adecuado sistema de ventilación, será sanitizada antes y después de cada función, habrá zonas debidamente demarcadas para mantener la distancia social y se abrirán las puertas diez minutos antes de que termine la exhibición.
Para esto, el personal será debidamente entrenado y deberá contar con vestimenta y material adecuado para evitar contagios, mientras que cada sala deberá tener en lugares visibles las normativas sanitarias a cumplir para permanecer en el lugar.
El protocolo da precisiones también sobre el accionar en lo referente a la recepción de proveedores y la manipulación de todo material implicado en la actividad comercial, del mismo modo en que prevé los pasos a seguir en caso de detección de un caso sospechoso entre los trabajadores o el público.